Nadie argumentará que con la ayuda de una anécdota puede convertirse en el alma de la empresa, demostrar que es un interlocutor ingenioso, conquistar a una chica o un chico que le guste. Contar chistes correctamente es un arte real.
Instrucciones
Paso 1
Primero, el narrador debe recordar que la anécdota debe contarse al grano y también mantener el tema general de la conversación. Una persona debe comprender claramente sobre qué temas de una empresa en particular se puede bromear y cuáles no son deseables. Por ejemplo, las bromas sobre jefes no serán muy apropiadas en presencia de jefes.
Paso 2
En segundo lugar, antes de contar esta o aquella anécdota, el narrador debe asegurarse de recordarla de memoria, hasta el final, es decir. si es posible, repítete una broma.
Paso 3
Necesitas contar una anécdota de manera fácil y natural, sin dudarlo, como si fuera entre tiempos. En general, como si se tratara de una simple historia escuchada de alguien. Solo en este caso, la forma de contar la historia será natural.
Paso 4
Algunas anécdotas contienen palabras y expresiones poco decentes. Pero de una historia así, así como de una canción, no se puede borrar una palabra. Tendremos que decirlo todo. Esta es otra razón para mirar a su alrededor y asegurarse de que el tema y el texto de la anécdota sean adecuados para la compañía reunida.
Paso 5
A la hora de contar un chiste, no será superfluo ayudarse con las manos, los pies, los gestos y las expresiones faciales. Entonces, la anécdota tendrá más posibilidades de que la gente de alrededor la perciba con éxito.
Paso 6
El narrador también debe recordar que la misma anécdota, contada dos veces, muy pocas veces puede hacerte reír. Necesita reponer su colección de chistes de vez en cuando con nuevos chistes.
Paso 7
Si la broma resultó incomprensible o poco divertida para los demás, no debe hacer una pausa larga y esperar una reacción positiva de los interlocutores. En esta situación, la decisión más correcta es continuar sin problemas la conversación.
Paso 8
Y sin embargo, el narrador de anécdotas debe recordar que explicar el significado de un chiste a petición de uno o varios oyentes es una tarea muy aburrida y tediosa.