Los claveles en flor serán una gran decoración para su balcón. No es difícil cultivarlo, pero es importante conocer algunos de los matices.
Al comprar semillas, es importante ver si se trata de una planta anual o bienal, ya que la segunda opción florecerá solo el próximo año.
Para extender la colorida decoración del balcón, es mejor plantar varias variedades diferentes de claveles a la vez, ya que cada uno de ellos tiene su propio período de floración.
Lo mejor es plantar semillas a mediados de abril en un sustrato suelto con la adición de 15-20% de arcilla y 15% de arena, tratada con un fungicida. Puedes utilizar casetes de siembra: colocar una semilla en cada celda, espolvorear con un poco de sustrato y cubrir con celofán. Además, los cultivos deben ventilarse regularmente. Las semillas germinan en 7-10 días a una temperatura de 19 a 23 grados. Cuando aparecen los brotes, la película de celofán debe retirarse durante el día y cubrirse nuevamente por la noche (esto debe hacerse hasta que todas las semillas hayan brotado).
El riego de los cultivos debe hacerse con cuidado y con moderación, y cuando aparezcan los cotiledones, reduzca el riego, pero no permita que el suelo se seque. Para una mejor floración y un color verde brillante de las hojas, durante este período, durante el riego, puede comenzar a alimentar con nitrógeno (0.05%), y cuando aparezcan las hojas reales, duplique la dosis.
Después de 4-5 semanas (en junio), cuando la temperatura diurna es de 18 a 21 grados y la temperatura nocturna es de 11 a 15 grados, trasplante las plantas en cajas de balcón a una distancia de 10 cm entre sí. Para hacer que los arbustos de clavel crezcan densos y compactos, puede pellizcar periódicamente la parte superior de los brotes.