¿Lleva mucho tiempo soñando con encimeras de mármol, y los precios del mercado "muerden"? No se enfade. Después de todo, el mármol artificial puede ser hecho por usted mismo y, a un precio de costo, será mucho más barato que el mármol ordinario.
Es necesario
Matriz de poliuretano para el producto, cemento (1 parte), arena de río (2 partes), agua (0, 2 partes), tinte (1% en peso de cemento), plastificante (1% en peso de cemento), relleno (guijarros, coloreado), batidora, envoltura de plástico
Instrucciones
Paso 1
Prepare un molde de poliuretano especial para el futuro producto. Prepara una mezcla para crear una losa de mármol. Mezclar cemento y arena de río. Combínalos con relleno. Los guijarros intercalados le darán a la piedra artificial un sabor especial. Agrega tintes. Gracias a ellos, la mezcla adquirirá un aspecto de "mármol": aparecerán rayas, manchas, puntos de otros colores y matices. Cuanto más desigual se distribuye el tinte, más natural se ve el producto terminado.
Paso 2
Vierta suavemente 80% de agua en la mezcla. Luego agregue el plastificante y mezcle suavemente. Después de 30 segundos, cuando la mezcla "flote" y se vuelva plástica, agregue el 20% de agua restante. Revuelva la mezcla hasta que quede suave con una batidora especial. Recuerde que cuanto mejor mezcle las materias primas, mayor será la calidad del mármol después.
Paso 3
Vierta la solución resultante en la matriz. Retire el exceso de material de la superficie del molde y cubra la parte superior con una envoltura de plástico. Deja que se endurezca y se seque. Después de 10-12 horas (durante este tiempo la materia prima se convierte en piedra) retire el molde y saque la losa de mármol terminada.
Paso 4
El mármol artificial obtenido de esta forma se puede utilizar tanto para decorar una chimenea como para revestir un baño. Además, es mucho más duradero que el mármol ordinario. Y además, este tipo de mármol no tiene una estructura porosa, por lo que no absorbe los líquidos derramados, ya sea té, café o agua carbonatada. Gracias a esta piedra milagrosa, hoy cualquiera puede decir "sí" a las fantasías sobre una chimenea revestida de granito.