Ficus es una planta de interior muy popular. Tiene una amplia variedad de formas. Lo suficientemente exigente para las condiciones de detención. Crece rápidamente, se propaga bien por esquejes. Requiere riego adecuado.
Instrucciones
Paso 1
A pesar de la gran variedad de formas, los requisitos para mantener las condiciones para todos los ficus son prácticamente los mismos. Son fotófilos, pero no toleran la exposición a la luz solar directa. El suelo debe ser nutritivo, pero no es deseable que el tamaño del recipiente exceda en gran medida el volumen del sistema radicular. A Ficus no le gustan las corrientes de aire, y con la hipotermia del suelo, incluso puede arrojar sus hojas. La temperatura interior deseada es de 25 a 30 grados en verano y de 16 a 20 en invierno. Los ficus deben regarse adecuadamente.
Paso 2
La cantidad óptima de agua requerida es individual para cada planta. Depende de muchos factores: edad y fase de desarrollo, estación y propiedades del suelo, de las condiciones externas: iluminación, temperatura del aire. Todos estos factores influyen en la intensidad del consumo de agua por parte de la planta.
Paso 3
Riegue los ficus no según lo programado, sino según sea necesario. El grado de humedad de la coma de tierra se determina mediante el tacto. Profundice el dedo en el suelo 2-3 cm, y si el ficus crece en una tina, entonces 5-7 cm. La tierra se adhiere al dedo, no es necesario regar. Si el suelo está seco, la planta debe regarse.
Paso 4
El agua para riego debe estar a temperatura ambiente. Afloja la tierra. Riegue lentamente para que el suelo esté bien saturado. Se vierte agua varias veces hasta que comienza a sobresalir del orificio de drenaje. Transcurrida media hora, escurre el exceso del palet. En verano, una deficiencia es perjudicial. El riego debe ser abundante, pero el suelo debe tener tiempo de secarse antes de la próxima vez. En invierno, el exceso de humedad puede ser perjudicial.
Paso 5
Para el crecimiento normal de las plantas, también es importante que la humedad relativa del aire sea al menos del 50% y preferiblemente del 70%. Cuando se mantiene en habitaciones con calefacción, así como en el calor del verano, es aconsejable utilizar la pulverización. El agua debe estar tibia y suave, el agua dura puede dejar manchas blancas en las hojas.