Debido al hecho de que tienen que crecer en una cantidad limitada de tierra, las plantas de interior responden particularmente mal a la falta de nutrientes. Los fertilizantes minerales y orgánicos compensan esta deficiencia.
Instrucciones
Paso 1
Para la cría y el riego, es mejor usar excrementos de paloma secos y viejos. El contenido de nitrógeno, fósforo y potasio en este estiércol es mayor que en fresco. Cuando se secan, las semillas de las malas hierbas contenidas en los excrementos pierden su germinación y los excrementos se desinfectan, eliminando la microflora innecesaria. Para hacer un aderezo líquido, los excrementos se diluyen con agua inmediatamente antes de la introducción en el suelo, en una proporción de 1:12. No tiene sentido insistir y almacenar tal líquido, ya que pierde la mitad de su nitrógeno.
Paso 2
Algunos expertos desaconsejan el uso de estiércol de aves de corral para fertilizar plantas en macetas de interior. La razón es que el alto contenido de amoníaco en una solución de este tipo puede dañar la planta. Un alto contenido de nitrógeno también es a menudo dañino para las plantas, especialmente aquellas sensibles, que son todas Gesneriaceae. Al regar con excrementos de paloma diluidos, son frecuentes los casos de quemaduras de raíces. No es higiénico plantar este fertilizante en un apartamento, y un olor desagradable persistente proveniente de las macetas puede causar dolores de cabeza y alergias.
Paso 3
El riego de las plantas con una solución de excrementos de aves debe hacerse con precaución, evitando que el líquido entre en contacto con las hojas. Esto puede causar enfermedades y caída del follaje. Un fertilizante líquido se prepara a partir de estiércol de aves de la misma manera que el purín. Las proporciones pueden ser de 1:10 a 1:12. Este fertilizante se usa de una a tres veces al mes. Algunas personas prefieren mezclar una pequeña cantidad de estiércol triturado en el suelo en lugar de diluirlo con agua. En este caso, existe el peligro de la acumulación de excrementos en los focos, lo que provoca graves quemaduras en las raíces. Hay casos frecuentes de pudrición de excrementos insuficientemente secos y, como resultado, enfermedades de las plantas.
Paso 4
Para no dañar la planta con una alimentación tan seria, debe conocer los signos que aparecen en la maceta con un exceso de minerales. Si, al regar con agua blanda y sedimentada, todavía se puede observar una floración blanca en la superficie de la tierra, esto es un signo seguro de un exceso de minerales en el suelo. Si la flor crece lentamente en verano y las puntas de las hojas se secan con suficiente humedad, también son signos de exceso de minerales. Si las hojas se marchitan y se caen, y el tallo es frágil y quebradizo, lo más probable es que esto indique lo mismo.
Paso 5
La falta de minerales se manifiesta en forma de desarrollo lento, resistencia insuficiente a enfermedades y plagas. La muerte de las hojas inferiores y partes del tallo indica una falta de minerales y vitaminas. Si no hay floración y los brotes son demasiado pequeños y frágiles, lo más probable es que la razón sea la misma.