Cuando era niño, me gustaba mucho el fascinante juguete óptico: el caleidoscopio, que inventó el físico escocés David Brewster en 1817 en Inglaterra.
Mirarás dentro del tubo milagroso y verás imágenes de mosaicos de colores extraordinarios. Vale la pena girar un poco - y nuevos patrones mágicos de sorprendente belleza.
También puedes hacer un caleidoscopio tú mismo.
Es necesario
- - el tubo del celofán alimenticio (la longitud - 23 cm y el diámetro - 5,3 cm);
- - 3 discos de plástico transparente cortados de frascos de plástico;
- - relleno para un caleidoscopio (cuentas, cuentas, trozos de papel de colores);
- - papel de aluminio adherido al cartón;
- - cartón perforado y papel de colores (para decoración);
- - papel negro (para cortar el disco exterior);
- - barra de pegamento;
- - tijeras;
- - cinta adhesiva;
Instrucciones
Paso 1
Primero, debe hacer un prisma triangular con tiras de papel de aluminio de 4, 3 cm de ancho y 21 cm de largo con el lado del espejo hacia adentro. Fije las tiras en un triángulo equilátero (en un ángulo de 60 ° C) con cinta adhesiva.
Cortar 2 discos con un diámetro de 5,3 cm de plástico transparente. Deje un disco transparente y pegue papel pergamino blanco en el otro.
Paso 2
Coloque el disco transparente en el prisma dentro del tubo. Vierta cuentas, cuentas sobre él.
Paso 3
Cierre el tubo con un disco mate, asegure los bordes con cinta transparente o pegamento.
Dé la vuelta al caleidoscopio, cierre este lado con un disco con un "ojo" y coloque un disco negro encima.
Decora el caleidoscopio con rayas de colores con un patrón de cartón corrugado.