Las imágenes de artistas profesionales siempre asombran la imaginación: con qué gracia y confiabilidad es posible representar un enorme mundo volumétrico de fantasía u objetos reales en una hoja de papel plana. ¿Cuál es el secreto de esta habilidad?
Es necesario
Materiales de dibujo: lápices, pasteles, acuarelas, gouache o una hoja en blanco de un editor de gráficos por computadora
Instrucciones
Paso 1
Antes de dibujar un objeto volumétrico, considérelo desde diferentes ángulos. Cómo cambia su forma desde diferentes ángulos de visión, dónde caen la luz y la sombra, cómo se ve este objeto en el vecindario con su entorno, cómo se manifiesta su color y estructura. Sea observador.
Paso 2
Cuando empiece a colocar bocetos de objetos en una hoja de papel (por ejemplo, si está pintando un bodegón), recuerde el concepto de perspectiva: este es el principio de colocar objetos en el espacio, lo que le permite transmitir volumen, distancia, tamaño y forma.
Es posible enfatizar bien el volumen con la ayuda de la perspectiva si coloca los objetos principales en primer plano: serán más claros, brillantes y expresivos en comparación con los que quedarán atrás.
No olvide que los objetos que se alejan de la imagen deben estrecharse y disminuir gradualmente, mientras que su color debe desvanecerse ligeramente. También ayudará a enfatizar la realidad y la extensión en el espacio.
Paso 3
Preste atención a cómo incide la luz sobre el objeto representado. La luz se dirige desde un lado determinado, mientras que una faceta del objeto se ilumina más. En pintura y gráfica, existen conceptos como "luz, semisombra y sombra". Según ellos, una parte del objeto sobre la que incide la luz debería ser la más ligera, este es el centro de luz del objeto. Desde un punto brillante, la pintura comienza a desvanecerse gradualmente, formando una "penumbra": una transición suave hacia el lado oscuro y sin iluminación.
Para representar correctamente "luz, sombra parcial y sombra" en la pintura, experimente con las sombras del color principal del sujeto. Agregue un poco de amarillo a la pintura para indicar la luz y mezcle tonos oscuros o grises para mostrar la transición de la luz a la sombra.
Si está trabajando de forma gráfica, utilice lápices de diferentes calidades. Con un lápiz duro, puede mostrar la luz (será más tenue), con un lápiz suave puede tramar penumbra saturada y sombras.
La frecuencia de los trazos también es importante: cuanto más cercanas están las líneas, más oscuro aparece el sujeto.
Paso 4
Si pinta objetos brillantes y brillantes, es probable que aparezcan reflejos y reflejos en ellos. Deslumbramiento: líneas de luz ubicadas exactamente en el lugar donde caen los rayos del sol. A veces, los reflejos pueden ser tan brillantes que el color del objeto en sí no es visible debajo de ellos: se vuelve amarillo.
Los reflejos son reflejos débiles sobre una superficie brillante. Muy a menudo, se obtienen reflejos ricos en porcelana y vidrio. Los reflejos no darán un reflejo brillante como un espejo, pero "imprimirán" en el objeto el color o el área del objeto reflejado.
Una imagen competente de reflejos y reflejos ayudará a transmitir correctamente el volumen.
Paso 5
Por supuesto, cualquier cosa volumétrica en el espacio proyecta una sombra natural sobre la superficie cerca de la cual se encuentra. leyes lógicas y físicas.