Un quemador de gasolina es un asistente indispensable para los turistas que realizan caminatas bastante difíciles fuera de casa. Es ideal para cocinar al aire libre, especialmente porque no se puede usar en interiores o en una tienda de campaña. Ya que en la etapa de botadura y en funcionamiento, cubre todo el interior de la misma carpa con hollín. Intente hacer usted mismo un quemador de gasolina.
Es necesario
- - bote;
- - compresor;
- - tanque;
- - quemador.
Instrucciones
Paso 1
Para hacer esto, necesita un compresor, un tanque de combustible, un receptor y el quemador en sí, respectivamente. Como compresor, puede usar una cámara de automóvil desde un camión. Primero tendrá que bombearlo, pero luego no necesitará un receptor en absoluto. O puede hacer pieles rudimentarias que se puedan impulsar con el pie. También puede usar un compresor de un refrigerador innecesario. Sin embargo, será necesario lubricarlo a mano de vez en cuando. Para hacer esto, baje la manguera de succión del compresor en la pila de aceite del eje.
Paso 2
Para el receptor, use un bote de plástico con un volumen de 5-10 litros, con un tapón de rosca hermético. Si usa un compresor de un refrigerador, el aceite lubricante se filtrará en el recipiente y deberá drenarse periódicamente para volver a lubricarlo. Por lo tanto, es mejor si el recipiente es translúcido.
Paso 3
Para la fabricación de un tanque de combustible, use un tanque de metal de 1,5 a 2 litros. Suelde dos tubos en la tapa del tanque: uno largo y uno corto. El primero debe bajarse casi hasta el fondo del tanque. También puede utilizar un frasco de 2 litros con tapa de plástico como recipiente.
Paso 4
No puede hacer el quemador usted mismo, por lo que tendrá que comprar este elemento. Llene el tanque de combustible no más de la mitad con gasolina Kalosha refinada. Coloque un filtro de aire simple en la entrada del compresor. Haga un filtro con un embudo, en el que tire un trozo de nailon.
Paso 5
El funcionamiento de dicho quemador se lleva a cabo bombeando aire con un compresor y poniéndolo a presión en el receptor, donde se suavizan las pulsaciones de la presión del aire. Luego, el aire se dirige al tanque de combustible, donde se mezcla con los vapores de gasolina. Después de eso, la mezcla de gases resultante ingresa al quemador. El quemador tiene un tornillo de ajuste con el que se puede regular la intensidad de la llama.