Por lo general, las velas se encienden en las casas ya sea durante un apagón o con motivo de algún tipo de celebración. Para la vida cotidiana, las velas simples y ordinarias servirán, pero para unas vacaciones necesitas algo especial. Por desgracia, las velas decorativas son bastante caras. Pero con cierta cantidad de imaginación y un mínimo de esfuerzo, puedes decorar la vela tú mismo.
Instrucciones
Paso 1
Entonces, tenemos una vela de cera alta y de diámetro medio. La forma más sencilla de decorarlo es utilizar cuadros autoadhesivos (que se venden en cualquier quiosco o tienda de artesanías). Las imágenes se pueden seleccionar según el tema de las vacaciones. Para la noche de los graduados, por ejemplo, aparecerán estrellas doradas, y para el Día de San Valentín: cupidos, corazones y similares.
Paso 2
Otra forma de decorar una vela también es bastante sencilla. Basta con envolverlo con una cinta de serpentina y atar los extremos a un lazo. Las velas decoradas con serpentinas doradas y plateadas se ven increíbles en la mesa de Año Nuevo, rodeadas de patas de abeto, conos dorados y bolas de cristal.
Paso 3
Otro método para decorar velas requerirá cierta habilidad por parte del decorador. Debes tomar un trozo de papel grueso y cortar un círculo. En el medio del círculo, se debe hacer un agujero igual al diámetro de la vela. A continuación, se pegan flores artificiales, vegetación y otros elementos decorativos al círculo de papel.
Después de que se seque el pegamento que sujeta los elementos decorativos al papel, puedes poner la vela en el candelabro colocando un círculo de papel decorado en su base.
Paso 4
Una pequeña canasta plana hecha de vid, una delicada cinta con un patrón floral servirá como una gran decoración para una vela. Solo necesitas poner una vela en una canasta y atar un hermoso lazo en su base. Si lo desea, puede agregar vegetación artificial y flores a la composición colocándolas alrededor de la vela.
Paso 5
Se obtienen decoraciones de asombrosa belleza a partir de velas flotantes. Basta verter agua en un jarrón-cesto de cristal, dejar que floten unas cuantas inflorescencias rosadas y un par de velas especiales encendidas. Extravagancia de reflejos cristalinos, flores delicadas, el agua más pura y la llama dorada de una vela: esta composición no será igual.