Los procedimientos de baño ayudan a una persona a descansar, relajarse y ganar fuerza. No sin razón se cree que el baño es capaz de limpiar no solo el cuerpo sino también el alma.
Cuando visite la casa de baños, debe llevar consigo una escoba fragante, por ejemplo, abedul, roble o eucalipto. Pero para que una visita al baño brinde solo un resultado positivo, debe aprender cómo ir al baño correctamente. En primer lugar, en ningún caso entre a la sala de vapor sin un tocado: el cabello acumula calor, por lo que puede sufrir un golpe de calor. No pases demasiado tiempo en la sala de vapor; recuerda que la resistencia de tu cuerpo tiene sus límites. Para activar las defensas del cuerpo, después de un baño de vapor, asegúrese de tomar una ducha fría o zambullirse en la piscina. Para darle a su piel un aspecto radiante y aterciopelado, lleve un exfoliante, por ejemplo, azúcar, café o miel. Y no olvide beber muchos líquidos mientras visita el baño; es mejor dar preferencia a los tés de hierbas, las bebidas de bayas y el jugo recién exprimido. Es útil que casi todos visiten la casa de baños, tanto niños como adultos, e incluso mujeres embarazadas. Aunque muchos ginecólogos prohíben que las mujeres embarazadas visiten una sauna o un baño, durante el curso normal del embarazo, los procedimientos de baño solo se beneficiarán si aborda todo con sobriedad y sabiduría. Las mujeres embarazadas deben ir correctamente a la casa de baños: prefiera saunas o baños con una temperatura baja en la sala de vapor (no más de 80 grados), no pase demasiado tiempo en la atmósfera congestionada, asegúrese de usar pantuflas de goma y coloque una alfombra o toalla en el estante. Lo mejor es visitar la casa de baños (si hablamos de una institución pública) como parte de un grupo especial para mujeres embarazadas. Los sistemas respiratorio y circulatorio de una mujer embarazada responden positivamente al ir a la casa de baños, y la piel está en excelentes condiciones: la dermatotoxicosis retrocede y las estrías disminuyen. Una visita adecuada al baño ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y a combatir enfermedades indeseables para las mujeres embarazadas como la gripe, los resfriados y todo tipo de infecciones virales. Además, existe la opinión de que las mujeres embarazadas que visitan regularmente la casa de baños toleran el parto mucho más fácilmente: el efecto positivo de los procedimientos de baño le permite aumentar la elasticidad de los ligamentos, aliviar la tensión muscular y relajar el sistema nervioso autónomo. Antes de visitar el baño, intente consultar con un ginecólogo para asegurarse de que el embarazo se desarrolle sin complicaciones.