Es fácil crear tal o cual imagen en la imaginación de los lectores. Pero si quieres que vean a una persona con una apariencia, esperanzas y sueños específicos, entonces necesitas hacer ejercicios a diario para desarrollar la habilidad de crear un personaje.
Trate de enumerar los cinco aspectos más importantes de su propia historia: su historia familiar, dónde nació, eventos importantes, etc. Crea un personaje que se vea diferente a ti, pero que tenga los mismos eventos clave en tu biografía, mira qué tipo de personalidad se puede formar como resultado.
Ahora crea un segundo personaje con una historia de vida opuesta utilizando el mismo método de cinco aspectos. ¿Cómo pueden estos dos personajes interactuar entre sí si la vida los une?
Crea tres o cinco personajes que se diferencian entre sí en al menos cuatro formas (altura, peso, rasgos faciales, deseos, compromisos, género, inteligencia, estilo de vestimenta). Al mismo tiempo, en un punto, todos deben coincidir.
Intente crear un boceto cómico de 1-2 páginas que contenga parejas hablando. Usa diálogos, expresiones faciales, lenguaje corporal. Por ejemplo, dibuje una escena en un bar donde una agente encubierta busca a un asesino y un tipo intenta golpearla.
Toma dos expresiones de la lista y ponlas en una cara: confiado, indeciso, frustrado, frustrado, coqueto, travieso, cansado. Luego, entréguele la lista a su amigo junto con su dibujo y pídale que adivine dónde se refleja qué expresión facial.