La mimosa tímida es conocida por muchos por su propiedad asombrosa: con un toque ligero, sus hojas plumosas y delicadas se pliegan a lo largo de la vena central. Flores de mimosa con numerosas inflorescencias rosadas que combinan bien con el delicado verde de las hojas. Entonces, ¿cómo se cultiva la mimosa en casa?
Instrucciones
Paso 1
Puedes plantar mimosa con semillas, que debes comprar en una florería o en línea. Remoje las semillas en agua caliente y déjelas reposar durante veinte minutos. Luego, pégalos suavemente en la tierra preparada y ya humedecida (en pequeños vasos de plástico), sin enterrar completamente las semillas. Cubra la parte superior del recipiente con papel de aluminio o vidrio y colóquelo en un lugar cálido y brillante.
Paso 2
Despegue periódicamente la película y vierta con agua tibia. Cuando los brotes alcancen una altura por encima de la caja de cerillas, plántalos en macetas permanentes y colócalos en el lugar más soleado de tu casa, esto es necesario para que la planta crezca de manera uniforme y correcta.
Paso 3
La temperatura óptima para cultivar mimosa desde la primavera hasta mediados de otoño es de 20 a 24 grados. Para que la mimosa hiberne con éxito, reduzca la temperatura del contenido en el invierno a 16-18 grados, pero no por debajo de 15.
Paso 4
A medida que la capa superior del suelo se seque, riegue la mimosa con agua sedimentada y blanda a temperatura ambiente. Se requiere riego abundante de primavera a otoño, luego se reduce a moderado. Evite secar en exceso y encharcar el coma terroso. Se recomienda rociar regularmente la planta con agua blanda, ya que la mimosa es muy sensible al aire seco.
Paso 5
No moleste la planta a menos que sea absolutamente necesario, especialmente un cultivo anual no debe ser replantado. Si la mimosa necesita un trasplante, transfiera con cuidado la flor a una maceta más grande, sin alterar el bulto de tierra. Para hacer esto, use un sustrato hecho de partes iguales de humus de hojas, césped, arena y turba. Coloque una buena capa de drenaje en forma de arcilla expandida o ladrillo roto en el fondo de la maceta.
Paso 6
Alimente a la mimosa con una solución de fertilizantes minerales dos veces al mes; en invierno, la alimentación prácticamente no es necesaria. En el primer año de la temporada de crecimiento, la planta da semillas, con las que se propaga anualmente. Recuerde, la mimosa categóricamente no tolera las corrientes de aire ni el humo del tabaco.