Un objeto para dibujar, como una chimenea, ayuda al artista a desarrollarse en dos direcciones a la vez. Dibujar la forma de un objeto le permite trabajar con líneas precisas y perspectiva. Los reflejos del fuego en la superficie permiten comprender las complejidades del claroscuro y las tonalidades de color.
Es necesario
- - papel;
- - lápiz;
- - acuarela;
- - paleta;
- - cepillos;
- - un vaso de agua.
Instrucciones
Paso 1
Tome una hoja de papel de acuarela blanco A3 y colóquela verticalmente. Con un simple lápiz (dureza TM o 2T), delinee la ubicación de la chimenea en el espacio. Su masa principal se encuentra en la mitad inferior de la hoja, la parte superior está ocupada por objetos de vidrio y una fina estatuilla, que crea la ilusión de espacio libre. Sin embargo, desde los bordes superior e inferior de la hoja, la distancia a los objetos será aproximadamente la misma.
Paso 2
Habiendo marcado con siluetas aproximadas la masa y forma de cada uno de los objetos, se procede a su construcción. La chimenea es un paralelepípedo rectangular. Dado que se despliega en el espacio, es necesario tener en cuenta las leyes de la perspectiva. Primero construya el cuerpo principal, sin elementos que sobresalgan. Como ayuda, puede dibujar ejes verticales y horizontales en la hoja. Luego dibuje dos líneas verticales paralelas entre sí: marcan las paredes laterales de la chimenea. Tenga en cuenta que sus bordes superior e inferior no son paralelos entre sí y están en diferentes ángulos con respecto al eje horizontal. El superior "se inclina" hacia el eje solo ligeramente, el inferior, mucho más.
Paso 3
Puede comprobar si ha construido estas líneas correctamente utilizando el método de observación. Coloque la muestra verticalmente frente a usted. Tome un lápiz en su mano extendida y "adjúntelo" a la línea que va a revisar. Luego, sin cambiar el ángulo de inclinación, lleve el lápiz a la línea correspondiente en la figura.
Paso 4
Empiece a construir los lados superior e inferior de la chimenea. No olvide tener en cuenta que sus líneas horizontales no son paralelas a las líneas adyacentes, sino ligeramente inclinadas con relación al eje horizontal central. Construya cada una de las protuberancias sobre la chimenea de acuerdo con este principio. Teniendo esto en cuenta, haga un agujero en el centro de la chimenea. Tenga en cuenta que debido a la peculiaridad de la ubicación del objeto en el espacio, el orificio de la figura se desplazará hacia la derecha.
Paso 5
Marque líneas decorativas en la chimenea con trazos finos: la distancia entre estos segmentos en la cornisa disminuirá a medida que se acerque al borde derecho.
Paso 6
Borra todos los ejes menores y empieza a trabajar con el color. Usa acuarelas o acrílicos. Determine qué partes de la chimenea están encendidas y cuáles están a la sombra. Empiece por las zonas más claras: mezcle ocre, marrón oscuro, un poco de ladrillo y aplique este tono en la parte superior izquierda de la chimenea. Mientras este relleno aún está húmedo, agregue más marrón oscuro a la paleta para obtener un tono terroso y aplíquelo en la parte inferior izquierda. Difumina los bordes de las flores suavemente para que la transición sea gradual.
Paso 7
Haga que la zona inferior derecha sea la más oscura, dejando líneas de color ocre claro en el costado del piso. Hacia el borde superior, aclara el color agregando más tonos amarillentos y un color ladrillo cálido.
Paso 8
Después de pintar toda la chimenea con los colores principales, trabaje en los pequeños detalles: pinte las sombras cerca de cada una y las protuberancias, agregue diferentes tonos de rojo y amarillo claro a la imagen de la llama.
Paso 9
Dibuja una sombra de la chimenea en la pared de la derecha para que la sombra sea más clara en la parte inferior de la pared con un borde blanco. La sombra adquiere el tono más saturado en el lado derecho directamente a lo largo de la pared de la chimenea.