La lana es muy sensible a los cambios de temperatura del agua, por lo que requiere un cuidado especial durante el lavado. Si el artículo de lana se ha encogido, será difícil estirarlo.
Instrucciones
Paso 1
La mejor forma de solucionar el problema es prevenirlo. Por lo tanto, compre y teje prendas de lana una talla más grande, teniendo en cuenta la posibilidad de que se encojan aún más.
Paso 2
El lavado correcto, que debe realizarse con agua tibia o fría, ayudará a evitarlo. Además, a la lana no le gustan los cambios bruscos de temperatura. Lávese lo antes posible usando polvos y detergentes especiales para tales cosas. Además, una cucharada de vinagre diluida en agua fijará el hilo de la ropa.
Paso 3
Si se encoge, humedezca una prenda de lana con agua fría. Luego colóquelo en posición horizontal sobre un plano y estírelo con los brazos en diferentes direcciones. Esto debe hacerse hasta que la cosa esté completamente seca.
Paso 4
Diluya una o dos cucharadas de peróxido de hidrógeno en diez litros de agua fría. Enjuague bien la prenda de lana, estirándola en la dirección deseada y déjela en remojo en agua durante una hora. Luego exprime ligeramente y seca en posición horizontal.
Paso 5
Remoja la ropa en agua fría y envuélvela en una toalla durante unos siete minutos sin escurrirse. Luego cuélgalo en una percha, o mejor en un maniquí, y espera hasta que esté completamente seco.
Paso 6
Puedes estirar la lana con una plancha de vapor. Para ello, coloque la prenda sobre una tabla de planchar y cúbrala con una gasa húmeda. Mientras estira la zona deseada, planche. Si el efecto es insuficiente, utilizar vapor, habiendo reducido previamente la temperatura de la plancha al mínimo.
Paso 7
Póngase en contacto con una tintorería, a menudo resuelve el problema de la deformación de la lana.