Actualmente, hay una gran cantidad de champús diferentes en los estantes de las tiendas, pero la mayoría de ellos tienen una composición química dudosa. Esto es lo que hace que los productos de higiene caseros a partir de ingredientes naturales ganen popularidad.
Hacer champú en casa es muy sencillo. Para crearlo, se requieren muy pocos ingredientes, a saber: una base de jabón líquido, una decocción de una determinada hierba (qué hierba elegir, decida usted mismo), base y aceites esenciales, que se pueden comprar en una farmacia y un jabón especializado. haciendo tienda.
Entonces, para preparar champú en casa, debe calentar la base líquida en un baño de agua a 35-40 grados, luego agregarle una cucharadita de aceite base (cuyo aceite depende del tipo de cabello, por ejemplo, si el cabello está seco, lo mejor es agregar aceite de germen de trigo, y si es graso en la raíz y seco en las puntas, luego de oliva o bardana), 20 gotas de aceite esencial (también depende del tipo de cabello) y 50 ml de decocción de hierbas.
En cuanto al caldo, se prepara de la siguiente manera: se colocan dos cucharadas de hierbas en una sartén esmaltada, se vierte agua fría, se lleva a ebullición y durante un par de minutos la mezcla se hierve a fuego lento, luego se enfría a temperatura ambiente. y filtrado. Si el champú está preparado para el cabello seco y dañado, se pueden agregar decocciones de ortiga, manzanilla, flor de tilo, si son grasas: caléndula, bardana, menta, hierba de San Juan. Puede almacenar este champú de un mes a dos: depende de la temperatura de almacenamiento.
Los productos comunes que se encuentran en todos los hogares también son excelentes champús para el cabello. Por ejemplo, las yemas de huevo son excelentes para lavar el cabello. Todo lo que necesitas hacer es tomar una o dos yemas, removerlas en un bol, luego aplicar sobre el cabello húmedo y masajear un poco. Lavar con agua tibia. Con el uso prolongado de un champú de este tipo, el cabello se vuelve más manejable, brillante y menos electrizado.
Otra opción es el pan de centeno. Es necesario amasar la pulpa del pan en un bol, agregarle agua o caldo, mezclar, aplicar sobre el cabello y masajear. Una sola aplicación es suficiente para dejar el cabello más suave y sedoso.