Hay ocasiones en las que desea calmar un ambiente de trabajo serio con un par de bromas o "gags". Puede ser el 1 de abril y un feriado corporativo, o simplemente el deseo de burlarse de un empleado descuidado. ¿Cómo puedes hacerle una broma a un colega y mantenerte alejado de sus sospechas?
Es necesario
cinta adhesiva, tijeras, acceso al ordenador de un colega, destornillador, barniz, varias pegatinas
Instrucciones
Paso 1
Quédese en la oficina un poco más de lo habitual. Pegue todos los ratones de computadora con cinta adhesiva para bloquear el control óptico. La broma tendrá éxito cuando todas las computadoras de la oficina pierdan el control de repente. Los empleados, seguro, comenzarán a ponerse nerviosos, llamen a los administradores. Lo principal es no confesar en este momento y también retratar a un empleado angustiado cuyo ratón no funciona. Del mismo modo, puede pegar las entradas del teclado y el mouse a la computadora.
Paso 2
Cambie todos los botones del teclado. Esto es fácil de hacer con un destornillador. Aquellos que trabajan a menudo en una computadora no estarán encantados con el hecho de que ahora llevará mucho tiempo restaurar la distribución del teclado.
Paso 3
Cubra todo el monitor con pegatinas. Cuantas más pegatinas se peguen, más tiempo dedicará un colega a limpiar el monitor del papel.
Paso 4
Cubra el lugar de trabajo de su colega con papel o cinta autoadhesiva. Se entiende por lugar de trabajo una mesa, una silla, una computadora y otros equipos de oficina.
Paso 5
Reemplaza todos los bolígrafos de la oficina con un "desperdicio" o sumerge la pasta en el barniz. Será muy divertido cuando todos sus colegas no puedan usar utensilios de escritura.
Paso 6
Cámbiate de anteojos. Si sabe qué tipo de gafas está usando su colega, cámbiele las gafas con el efecto contrario. Esta "broma" funcionará si el empleado usa anteojos solo para trabajar con documentos o con una computadora. Si una persona los usa sin quitárselos, es poco probable que sea posible gastarle una mala pasada de esta manera.
Paso 7
Cubra el micrófono con cinta adhesiva en el auricular. Cualquier intento de realizar una llamada se convertirá en una “prueba de fuerza” para tu colega, porque repetir lo mismo varias veces es muy difícil y desagradable.