Si un marcador o rotulador no se usa durante mucho tiempo, se seca antes de que se acabe el tinte. Se puede restaurar, pero para ello, primero se debe abrir el cuerpo de la herramienta.
Instrucciones
Paso 1
La mayoría de los marcadores tienen un tapón en la parte superior, que se sujeta en el cuerpo mediante un abultamiento anular que encaja en un hueco de la misma forma en el cuerpo. A veces hay varios engrosamientos en la tapa y huecos en el cuerpo, y luego se debe aplicar una fuerza suficientemente grande para sacar la tapa del cuerpo. Ponte ropa que no te importe arruinar, coloca un periódico sobre la mesa para que no se manche de tinte, luego con cuidado para no lastimarte los dedos, quita la tapa con un cuchillo afilado para moverla levemente.
Paso 2
Después de que se suelte la tapa, sáquela con unos alicates. ¿Puedes oler el alcohol? Si es así, esta sustancia se utiliza como disolvente en el marcador. Vierta unas gotas de vodka o alcohol etílico puro, nunca use alcohol metílico o isopropílico. Si no huele a alcohol, diluya el tinte con agua; fue lo que se utilizó en este rotulador como disolvente inicialmente. Si se vierte alcohol en él, la punta porosa se deforma rápidamente, ya que no está diseñada para esto.
Paso 3
Colocar el rotulador en posición vertical con la punta hacia abajo, cerrar y dejar en esta posición unos minutos. Pruebe la herramienta en acción; ahora debería dejar una marca clara.
Paso 4
Si la pluma no se recupera, entonces el motivo no es el secado, pero el tinte se ha agotado en el marcador. Compre tinta del mismo tipo y color que originalmente en el marcador, abra el marcador y vuelva a llenar como se describe arriba. El uso de tinta inadecuada puede provocar fugas y deformación de la punta. El uso de un rotulador de este tipo será muy incómodo.