“Si quieres entender a un caucásico, aprende a bailar lezginka”, hay un proverbio de este tipo. Esta danza ha unido a más de un centenar de pueblos caucásicos. Incendiario, fogoso, alegre: no deja indiferente a nadie.
Lezginka es una antigua danza folclórica de los pueblos caucásicos. Hoy es difícil decir dónde se originó, esta primacía es disputada por muchos. Lezginka es un baile único. Graciosa, con movimientos muy claros y bruscos, demostrando la fuerza, belleza y orgullo de la bailarina.
Hermosa danza
Existe una leyenda de que los antiguos guerreros caucásicos bailaron lezginka antes de la batalla; poseyendo una energía especial, la danza elevó el espíritu, otorgando coraje y coraje. Las danzas rituales antiguas son el prototipo de Lezginka. Ella ha absorbido todo lo mejor que está solo en los bailes del Cáucaso. Embruja, se atrae con un ritmo groovy para que las propias piernas pidan bailar, y todo el cuerpo comienza a moverse al compás de la impetuosa melodía. Lezginka no dejará indiferente a nadie.
Uniendo a los lezginka
El lezginka es bailado por más de 100 personas (karachais, balkars, avars, lezgins, circasianos, adygs, georgianos, armenios, azerbaiyanos, etc.). Cada uno de ellos tiene sus propios movimientos característicos, pero hay aquellos que se realizan de la misma forma para todos. El lenguaje de la danza es el mismo para todos. Aquí el Lezginka actúa como un "puente" cultural entre los pueblos. Los caucásicos pueden pararse en un gran círculo en cualquier lugar y empezar a bailar lezginka. No necesitan explicarse algo entre ellos, el ritmo lo hará por sí solo.
Técnica de ejecución
La melodía de lezginka es dinámica, clara. El ritmo es rápido. Tamaño musical - 6/8. La postura es muy importante: el hombre se mantiene extremadamente erguido, tenso como una cuerda. El cofre sobresale ligeramente hacia adelante. Casi todo el baile se realiza de puntillas. Los movimientos son bruscos, bruscos. En todo el cuerpo hay belleza, gracia y al mismo tiempo masculinidad y fuerza. Los brazos están extendidos como las alas de un águila y las piernas hacen decenas de movimientos por minuto.
Hombre y mujer
Lezginka es una danza predominantemente masculina, porque demuestra cualidades puramente masculinas: coraje, fuerza, beligerancia. Una mujer que baila lezginka en público no debe repetir los movimientos de su pareja, haciendo ataques bruscos, esto es indecente. Ella debe ser femenina. Una espalda erguida, una colección levantada, una sonrisa, suaves ondas de manos, pasos elegantes: así es como una niña baila un lezginka.
Otra cosa es un círculo amistoso cercano, donde puedes rendirte por completo al baile. Las mujeres bailan con mucho gusto, pongo toda mi alma y pasión. ¿Cómo podría ser de otra manera? Después de todo, Lezginka es un baile maravilloso e incendiario, amado por todos los pueblos. Es imposible resistirse a él.