Si te invitan a un cumpleaños y quieres darle personalidad a tu regalo, adjunta una tarjeta de felicitación hecha con tus propias manos. Se puede hacer el día anterior, sin haberle dedicado tanto tiempo.
Es necesario
- - tijeras
- - pegamento
- - regla
- - los lápices
- - papel de diferentes colores
- - cartón
Instrucciones
Paso 1
Para el trabajo, es mejor usar pegamento producido en forma de lápiz. El pegamento líquido sobresaldrá del aplique, haciendo que el trabajo se vea desordenado. Cuando trabaje con un lápiz y una regla, trate de hacerlo con la mayor precisión posible, no presione con fuerza el lápiz para poder borrar la línea dibujada incorrectamente.
Paso 2
Tome papel muy grueso o, por el contrario, cartón delgado y recorte la base de la futura postal. Doble la tarjeta por la mitad como si fuera un librito.
Paso 3
Deje la tarjeta a un lado por ahora y piense qué motivo le gustaría representar en ella. Trate de imaginar los gustos del cumpleañero, piense en lo que le gustaría.
Paso 4
Recorta los detalles del futuro aplique del papel. Pueden ser velas, globos, flores, corazones, números e incluso una fotografía, nadie limita tu imaginación. Pegue los detalles a la tarjeta para obtener un lindo aplique. Para obtener más efecto, puede trazar las partes pegadas con un rotulador negro fino.
Paso 5
No olvide dejar espacio en el anverso de la postal para la inscripción al estilo de "¡Feliz cumpleaños!" o "¡Feliz aniversario!" Use un lápiz, rotulador o colores brillantes para escribir las letras.
Paso 6
Pero la base de tu postal no será su apariencia, sino las palabras que escribas en su interior, felicitando al cumpleañero por sus vacaciones. No te salgas con frases generales, deja claro que tus felicitaciones vienen del fondo de tu corazón. No olvides suscribirte a las felicitaciones. Es muy posible que, al ser trasladado, la persona que cumple años se quede con la postal durante muchos años y la vuelva a leer una y otra vez más tarde.